El miedo a su carrera

El miedo a su carrera

El miedo a su carrera

El miedo a su carrera

La filósofa de la tecnología Somi Arian sostiene que el futuro del trabajo no es tan aterrador como puede pensarse. Arian describe las tres culturas laborales dominantes en el siglo XXI: la corporativa, la empresarial y la de los influencers o influenciadores, y aconseja sobre cómo elegir la mejor para usted. Energética y accesible, Somi Arian escribe con un estilo que se dirige a los millennials y a la generación Z, cuando se enfrentan al emocionante y desafiante futuro del trabajo.

La perspectiva, la mentalidad y las habilidades humanas son cruciales para el éxito de su carrera en el nuevo mundo laboral.

El mundo del trabajo está cambiando más rápidamente que nunca. Pero la velocidad se produce a costa de la claridad, lo que dificulta la toma de decisiones acertadas. Incluso los nativos digitales –los millennials y la generación Z– encuentran el ritmo de los cambios intimidante. Con perspectiva, una buena mentalidad y habilidades humanas, puede aprender del pasado, comprometerse con lo que es en el presente y prepararse para el futuro.

“Si puede alinear sus valores con una visión realista de lo que se necesita para construir una carrera satisfactoria, está en el camino correcto.”

El trabajo es tan antiguo como la humanidad y ha evolucionado a lo largo de la historia. Los primeros seres humanos aprendieron a colaborar y formar vínculos, luego a organizarse, y después, inevitablemente, a explotarse unos a otros. Pocas personas tenían acceso a la educación y sobrevivían solo del trabajo.
Los cuáqueros consideraron el trabajo como una vocación superior, creando así al empresario moderno.
Introdujeron la innovación, que provoca una perturbación y, finalmente, una revolución.

La Primera Revolución Industrial conllevó la mecanización y desplazó el trabajo físico. La Segunda Revolución Industrial trajo la idea moderna de trabajo con la producción y el consumo en masa. La Tercera Revolución Industrial introdujo a los trabajadores del conocimiento que dependían de la educación para tener éxito. Ahora, al surgir la Cuarta Revolución Industrial, las habilidades humanas importan más que nunca en una era de máquinas inteligentes.

Las tres culturas laborales dominantes en el siglo XXI son: la corporativa, la empresarial o start-up y la de los influencers o influenciadores.

El mundo desarrollado presenta tres culturas dominantes en el lugar de trabajo: la corporativa, la empresarial o de start-up y la de influencia. La cultura corporativa tiene su origen en la invención del reloj en el siglo XIX. Los jefes medían la productividad humana en función del tiempo para mejorar la producción y deshumanizaron a los trabajadores tratándolos como piezas de una máquina. Para compensar la pérdida, los ingresos aumentaron y los precios bajaron, dando paso al consumismo. Durante el siglo XX, y especialmente después de la Segunda Guerra Mundial, las empresas necesitaban más trabajadores con formación. Algunos trabajadores del conocimiento se resintieron de las estructuras jerárquicas y se volvieron emprendedores, lanzando la cultura de las start-ups.

“En lugar de títulos de trabajo específicos, sugiero que pensemos en nuestros roles en la sociedad.”

Las start-ups rechazaron la jerarquía en favor una estructura empresarial plana. Internet alimentó la estructura plana al facilitar la comunicación por correo electrónico entre las divisiones de una empresa. Las start-ups rechazan el enfoque cerebral izquierdo de los negocios por uno derecho, al priorizar la creatividad, la flexibilidad y la intuición sobre el análisis y la lógica. La cultura de las start-ups no teme al fracaso. Itera en lugar de seguir planes establecidos. Entre los empresarios de la cultura de las start-ups se encuentran los desarrolladores tecnológicos, los creativos (artistas y escritores), los trabajadores temporales y las microempresas que emplean a menos de cinco personas, y que constituyen más de la mitad de las empresas
de Estados Unidos.

La cultura más reciente es la de los influencers o influenciadores. Nacida de los medios sociales, genera un enorme efecto en la vida de los millennials y la generación Z. Los influenciadores son celebridades en línea que monetizan su influencia mediante la acumulación de seguidores, que emulan sus gustos y decisiones.

Algunos influencers utilizan los medios sociales para alcanzar notoriedad; muchas personas los utilizan para dar forma a la cultura y aportar valor a la comunidad. Por desgracia, los propietarios de las plataformas se llevan los beneficios financieros. Tener muchos seguidores en las redes sociales no le hará merecedor de un préstamo bancario ni le ayudará a comprar alimentos. En la nueva economía de las plataformas, los grandes ganadores son los pocos individuos que poseen las plataformas de alojamiento de contenidos como Facebook, LinkedIn e Instagram. Los datos son la nueva moneda, y las nuevas estrategias para compensar a las personas por sus datos reducirían la desigualdad económica creada por los gigantes tecnológicos.

La IA avanza rápidamente; las relaciones entre humanos y máquinas definirán el futuro del trabajo.

La inteligencia artificial afectará al lugar de trabajo, pero tiene limitaciones. Por ejemplo, la IA carece de inteligencia general, una comprensión del mundo que se deriva de la experiencia subjetiva. La IA se destaca en la identificación de patrones en grandes conjuntos de datos. No puede aprender del mismo modo que los humanos, todavía. Como la IA crece y mejora constantemente, nadie puede predecir su impacto a largo plazo. Sin embargo, su identidad laboral se parecerá más a una tienda de campaña que a una casa de piedra.
Debe estar siempre preparado para hacer las maletas y mudarse.

“Es probable que las relaciones entre el hombre y la máquina sean una de las áreas más desafiantes de la sociedad humana en las próximas décadas.”

Los retos de la IA son tres: aprender, adoptar y retener los objetivos humanos. El objetivo humano más importante es aumentar la felicidad y disminuir el sufrimiento. Alinear ese objetivo con la poderosa tecnología disponible puede dar paso a una nueva edad de oro del trabajo en la que las personas se centren en mejorar sus habilidades a través de la educación superior y la autoexploración. En lugar de títulos de trabajo, las personas tendrían roles sociales. Tendrán que ser más intuitivos, emocionalmente inteligentes y mejores comunicadores. Durante la transición a esa nueva era, los empresarios deben rehumanizar el tiempo y abandonar las expectativas de que los humanos trabajen como máquinas.

En el pasado, las computadoras eran herramientas “básicas” que ayudaban a procesar la información. Ahora, con el aprendizaje automático, las personas pueden enseñarles a asumir tareas, como la edición de un libro. Sin embargo, con las máquinas tomando más decisiones, la gente debe desarrollar una ética de la IA para abordar las responsabilidades sociales de las máquinas. ¿Debería, por ejemplo, una persona demandar a un carro autoconducido por matar accidentalmente a una persona? Las máquinas tendrán un lugar en la sociedad que nadie ha concebido. Pero incluso la tecnología más avanzada no puede sustituir la capacidad de las personas para la interpretación contextual, las interacciones cara a cara y el juicio crítico.

Aprenda qué tipo de persona es usted, qué le motiva y cómo define el éxito.

Comprender el panorama profesional debería ayudarle a encontrar su lugar en él. Cada persona es diferente, pero hay ciertos rasgos de personalidad que, una vez identificados, pueden ayudarle a navegar por sus opciones profesionales. Una popular herramienta de evaluación, la prueba OCEAN (por sus siglas en inglés) mide los siguientes rasgos en un espectro:

• Apertura – Cuán abierto está usted a nuevas experiencias y a nuevas personas.

• Conciencia – Qué tan confiable y responsable es usted.

• Extroversión – Qué tan cómodo se siente entre la gente.

• Amabilidad – Su capacidad para colaborar y empatizar con otras personas.

• Neuroticismo – Qué tan estable está usted emocionalmente.

Además de comprender sus rasgos de personalidad, debe saber qué le motiva. Los tres principales motivadores son: la afiliación con los demás, el poder o la influencia sobre las personas y el logro en una tarea determinada.

Si tiene poca extroversión, por ejemplo, pero mucho éxito, es posible que hablar en público no sea para usted, pero se esforzará por adaptarse. Alinee sus rasgos de personalidad y sus motivadores. Pregúntese qué significa el éxito para usted. ¿Quiere ganar dinero, tener impacto o ganar reconocimiento? Sean cuales fueren sus oportunidades, recuerde que hoy en día la gente actúa a nivel local, pero sus acciones tienen implicaciones alrededor del mundo.

“Le insto a mantener la mente abierta y a considerar la posibilidad de que el cambio pueda venir de fuentes inesperadas.”

Las tecnologías que construyen y mantienen el mundo han crecido tan rápidamente, que los humanos tienen dificultades para considerar y planificar sus consecuencias. La desigualdad económica se está acelerando y las máquinas con algoritmos devoradores de empleos perturbarán aún más los lugares de trabajo. Cultive sus habilidades humanas. En un futuro previsible, las habilidades más demandadas serán la inteligencia emocional, la atención plena, la creatividad contextual y el pensamiento crítico.

La inteligencia emocional y la atención plena le ayudan a entenderse a sí mismo y a los demás.

Durante décadas, las pruebas de IQ sirvieron de base para calcular la inteligencia humana. Ahora, con más máquinas capaces de hacer el trabajo del conocimiento, la inteligencia emocional se ha convertido en la nueva métrica. Las características de una inteligencia emocional fuerte son la automotivación, el control de los impulsos, el retraso de la gratificación, la regulación del estado de ánimo, la empatía y la esperanza.

Dado que la inteligencia emocional se deriva de la experiencia subjetiva, no es fácil ponerla a prueba. Daniel Goleman, pionero en este campo, desarrolló una prueba para evaluar tres áreas importantes: comprenderse a sí mismo, comprender a los demás y tener la capacidad de emprender las acciones adecuadas.

“Las personas que están plenamente comprometidas en su lugar de trabajo y en su vida personal tienen una carrera más feliz y unas relaciones más significativas.”

Para mantener un estándar de autocontrol, retraso de la gratificación y regulación del estado de ánimo, debe cuidar su salud física y emocional con una dieta equilibrada, descanso y ejercicio. Con la empatía en declive debido a la dependencia de las comunicaciones digitales, una inteligencia emocional fuerte se ha vuelto más importante que nunca para su vida privada y su carrera.

La atención plena es la capacidad de observar cómo su cerebro evalúa y toma decisiones. Le obliga a abandonar la configuración del piloto automático para que pueda tomar mejores decisiones, establecer prioridades, controlar sus emociones, aprovechar las buenas oportunidades y disfrutar de una mejor salud general. Le ayuda a participar plenamente en la vida. Para practicar la atención plena, tenga en cuenta sus tres modalidades:

1. Atención focalizada – Preste atención a lo que ocurre en el presente.

2. Seguimiento abierto–Evalúe cómo se siente sin emitir juicios.

3. Aceptación–Tener conciencia de que se necesita práctica para cambiar sus hábitos, le ayudará a ser más comprensivo.

Para practicar la atención plena, reserve un tiempo cada día para dejar de lado las distracciones y simplemente respirar, prestando atención a su respiración. Cada uno tiene su propio enfoque; haga que el suyo forme parte de su rutina diaria.

El pensamiento crítico le ayuda a tomar buenas decisiones. La creatividad contextual le da perspectiva.

Al igual que la inteligencia emocional, el pensamiento crítico es subjetivo y emerge de la toma de decisiones acertadas. Requiere comprensión de uno mismo y de otras personas, algo que las computadoras no pueden hacer. También requiere curiosidad por lo que no se sabe. Con demasiada frecuencia, la gente es presa del autoengaño, que distorsiona la realidad. Para tomar decisiones acertadas, necesita saber lo que quiere y conocer las posibilidades de conseguirlo. Esto último se basa en la comprensión de la probabilidad, que es difícil para los humanos. Usted necesita las habilidades de pensamiento crítico para saber si se adapta mejor a una carrera escalable o no escalable. ¿Es usted jefe o empleado? Una carrera escalable exige sacrificios y las posibilidades de éxito masivo son escasas. Una carrera no escalable permite un mayor equilibrio y la
probabilidad de un éxito modesto.

“Cuanto más aceleradas se vuelven nuestras vidas, más probabilidades tenemos de fracasar en el pensamiento crítico, porque pensar críticamente necesita que vayamos más despacio.”

La creatividad contextual es subjetiva y las máquinas no pueden replicarla. El contexto cambia la perspectiva. Es interpretativa; toma la experiencia –la suya y la de otras personas– y la combina con la empatía para resolver problemas y enriquecer vidas. Se basa en la diversidad y en la comprensión de los conceptos. Las personas con creatividad contextual tienen un enfoque multidisciplinar. Por ejemplo, para ser una persona influyente con éxito, se requieren buenas habilidades comunicativas, interpersonales, técnicas y empresariales. Colabore, pero siga siendo el “ancla” de su negocio. Al encontrar o construir un
nuevo contexto para usted en una carrera, debe aceptar el fracaso. Salga de sí mismo para ganar perspectiva.
Esté presente, aprenda a improvisar y esté abierto a las contradicciones.

El trabajo no es solo una forma de ganar dinero o de sobrevivir. Forma parte del ser humano. En el siglo XXI hay más oportunidades que nunca para encontrar un trabajo significativo. Decida qué significa el éxito para usted, con base en sus valores, y evalúe de forma crítica lo que debe hacer para conseguirlo. Alinear sus valores con una perspectiva realista le pone en el camino de la realización.

Conclusiones y lecciones aprendidas

• La perspectiva, la mentalidad y las habilidades humanas son cruciales para el éxito de su carrera en el nuevo mundo laboral.
• Las tres culturas laborales dominantes en el siglo XXI son: la corporativa, la empresarial o start-up y la de los influencers o influenciadores.
• La IA avanza rápidamente; las relaciones entre humanos y máquinas definirán el futuro del trabajo.
• Aprenda qué tipo de persona es usted, qué le motiva y cómo define el éxito.
• La inteligencia emocional y la atención plena le ayudan a entenderse a sí mismo y a los demás.
• El pensamiento crítico le ayuda a tomar buenas decisiones. La creatividad contextual le da perspectiva.

Sobre el autor/a o autores

La galardonada cineasta, autora, filósofa de la tecnología y empresaria Somi Arian fundó Smart Cookie Media y cofundó Career Drive.